No hay porque preocuparse....

No se muy bien como empezar este post...

Como me suele ocurrir a veces, tengo sensaciones y ideas mezcladas que me cuesta plasmar en letras, pero como siempre me han dicho, lo que cuesta, cuando se empieza se avanza, así que, aquí estoy, empezando...

Sé que muchos me habéis buscado estos días, en los sitios habituales donde suelo estar, y habéis encontrado mi ausencia, y eso os ha causado preocupación y me la habéis mostrado. Otros habéis pensado que estaba de vacaciones, pero tampoco es el caso...

Agradezco mucho que os preocupéis, pero no debéis hacerlo, no hay motivo para ello. 

Estoy bien, simplemente, llevo unos días un poco mas reflexiva de lo habitual...y lo habréis notado por mis posts.

No se porque, siento la necesidad de no navegar a la aventura. Necesito dejar la barca en un buen puerto y tomarme con calma el momento. Me apetece reflexionar, dejarme llevar por lo que siento, por todo cuanto me rodea, y ver el camino que he recorrido, interiorizarlo y ver hacia donde voy.

Mi carácter, tiene una mezcla extraña entre impulsividad y raciocinio, y ahora mi parte racional está actuando con más fuerza.

Con esto, no quiero decir, que me esté replanteando mi vida en un sentido de cambio radical, que mi sentir haya cambiado o que surjan dudas en mí. 

Al contrario, es como cuando toca hacer orden en un armario, que de ir sacando y poniendo ropa, al final queda patas arriba.

Saco la ropa, la observo y veo si realmente me la voy a poner o vale más la pena reservar el espacio que ésta ocupa para otra que me resulte más útil.

Ese trabajo, cuando es por obligación, suele ser bastante pesado, pero cuando te apetece dejar impecable ese armario....pues...como que se hace una tarea agradable,¿verdad???...pues a mí ahora me apetece, me encuentro con la serenidad suficiente para mirar en mi armario interior y ordenarlo.

Llevo ya un poquito de tiempo en un camino diferente del que hasta ahora tenía, muchas cosas nuevas han llegado y entrado en mi interior, unas se han quedado sin esfuerzo alguno y otras he tenido que usar un calzador, pero de todas ellas he aprendido algo.

Me siento una mujer diferente. He ganado en serenidad y en seguridad en mi misma. 

He tenido que ceder en muchos aspectos, someter muchos de los caprichos que hasta ahora me daba sin ningún problema. 

He tenido que esforzarme por comprender y asumir. 

He tenido que ser valiente y tomar decisiones difíciles. 

He tenido que dejarme guiar cuando siempre he llevado las riendas. 

He tenido que atreverme a sentir cuando siempre lo he retenido. 

He tenido, porque así lo he deseado, que hacer infinidad de cosas y éstas son las que ahora, ordeno, al mirar hacia atrás, un atrás muy reciente, y las que hoy, disfruto viendo como han hecho mella en mi.

Puede resultar, para una inexperta como yo, un caos ordenar este armario, pero estoy disfrutando con ello, aunque me lleva tiempo, y por eso, me lo estoy tomando, quizás, dejando de lado, otras actividades que solía hacer, para dedicarme a ello.

No dudéis que si me necesitáis estaré ahí, bien lo sabéis, pero ahora es tiempo de reflexión e interiorización personal, porque así lo deseo....y...ya vereis lo chuli que quedará todo ordenadito...jijijiji

Feliz fin de semana!