De par en par...

Puede que no sea el mejor momento para expresarme con lógica, porque tengo los sentimientos a flor de piel, pero también sé que no hay momento mejor para mostrar con sinceridad, sin tapujos, como siento.

No hace mucho tiempo que descubrí que en mi interior había un sentimiento diferente, ya he hablado en otros post de este descubrimiento, y poco a poco me fui ubicando y viendo qué era esa necesidad que iba adquiriendo.

No puedo dejar fuera de este sentimiento que albergo a algunas personas que se cruzaron en mi camino, o yo en el suyo, pero es desde que estoy Contigo que me estoy desarrollando como sumisa y por supuesto como persona.

En muchas ocasiones me abruma lo que siento, tanto porque el placer que me aportas es desconocido como porque me resulta realmente difícil avanzar en los retos que ponemos en mi camino.

Quisiera poder abrir mi ser de par en par, que entraras y vieras que en cada rincón está escrito Tu nombre, que respira solo si Tu lo alientas y reposa si le concedes el descanso.

Es tan grande lo que me haces sentir, que solo la sombra de poder perder, por mi torpeza, todo cuanto me concedes me hace sentir una gran impotencia y en ocasiones, me hago pequeña ante el temor de no ser capaz de darte aquello que deseo.

Sé que lo que siento por Ti es lo más grande que he cobijado jamás, y como incluso a mi misma me asusta, intento refrenarlo, serenar y no dejarme llevar por el perfume embriagador de mi propio sentir.

Conozco tu serenidad, tu calma, reflexión y autocontrol y deseo ser para Ti cuanto anhelas, pero hoy necesito sacarlo, dejarme llevar por ese sentimiento, vivirlo intensamente, gritar al mundo con mi mirada cuanto te amo, expresarte, aunque lo sepas, todo lo que significas para mí, sentirme afortunada y dejar los temores de lado.

Necesito imaginar la calma de sentirme, aunque sé que no es así, la sierva que te complace, que te da todo cuanto deseas y que no me soltaras de la mano. Quiero saber que seré castigada, con dureza si lo crees, pero que jamás por mis errores perderé Tu guía.

Ojala sea capaz de avanzar en Tu doma y ver en Tus ojos el orgullo de mis logros.

Mi ser te pertenece sin remedio y deseo que así sea.

Mi Señor....permíteme acurrucarme en el suelo a Tus pies y notar el calor de Tu cuerpo...te lo suplico....