Invádeme...

Así, por favor, abrázame...

haz que Tu piel se clave en la mía,

déjame notar Tu aliento, 

recuérdame en mi olvido.

Así, mi Señor, ámame...

invádeme con Tu calor,

escribe mi noche entre Tus brazos,

invéntame en Tu sueño.

Así, mi locura, avívame...

humedece mi cuerpo,

fúndelo con el Tuyo,

reconócete en mi interior.

Así, mi pasión, quiéreme...

susúrrame lo que no dirías,

ahógame entre Tus caricias,

piérdeme y recupérame.

Así, como desees, muéstrame...

descríbeme sin prisa,

trázame entre las sábanas,

hazte con mi lascivia.

Así, mi Dueño, contrólame...

quédate con mi esencia,

úsala a Tu conveniencia,

concédeme mi anhelo.

Así, mi Señor, condéname a Ti...