En este día...

Casi nada soy de cuanto quiero ser,

pues soy injusta sierva de débil obediencia,

impaciente esclava de atropelladas palabras.

Casi nada soy de cuanto quiero ser,

pues atesoro innombrables vergüenzas 

que debería sin duda purificar,

antes de postrarme digna para Ti.

Casi nada soy de cuanto quiero ser,

mas me siento enormemente afortunada,

agradecida por poder de Ti aprender

y esperanzada por llegar quizás a ser.

Quisiera hoy, en este día especial,

poder gritar a los vientos que por Ti lo soy,

y regalarte lo que a mi pesar no puedo darte

y que, sobradamente, eres merecedor.

Casi nada soy de cuanto quiero ser,

de eso no tengo duda alguna,

y tampoco de que eres Tu la serena lámpara

que apareces iluminando la gruta a seguir,

cuando asustada en la noche oscura

ocultando mi temor al repudio,

elevas mi ánimo para mostrarme

cuanta belleza esconde Tu senda.

Casi nada soy de cuanto quiero ser,

pero confío en ser bajo Tu guía,

aquello que cumpla con Tu querer

y aunque de poco sirva el deseo

ese es hoy el presente que pediré,

por y para Ti...

T'estimo molt, mi Señor...