Pleasure Shelter: Miedo...

viernes, 15 de junio de 2012

Miedo...



El caso es que, como suele pasarme, mientras me entretengo en mis tareas, mi mente no para, y me ha llevado a pensar en lo que ha supuesto/supone para mi someterse, en como, a pesar de estar completamente convencida, de saber que mi esencia me lleva a ello, de encontrar la felicidad en los sentimientos que me aporta la sumisión, en infinidad de momentos me he rebelado/rebelo contra ello.

Puede parecer absurdo y no es fácil de comprender, si tan claro lo tengo, porque huyo de ello, y he intentado analizar con sinceridad mis porqués y...la palabra que me he repetido más veces es MIEDO...

¿Miedo a que, dana? ¿porque?

- Miedo a creer, a volver a confiar.
- Miedo a caer en las garras del engaño.
- Miedo al vínculo, a ese que debe crearse y que me obliga a quitarme la coraza y mostrarme.
- Miedo a decepcionar, a que todo fuera tan solo una ilusión de mi mente e hiciera perder el tiempo.
- Miedo al rechazo, a sentirme menospreciada y no querida.
- Miedo a la necesidad, a la dependencia de otra persona.
- Miedo a la perdida.
- Miedo a no ser capaz y tener que asumir mi abandono.
- Miedo a enfrentarme a mi misma, a conocerme y que no me guste lo que veo.
- Miedos a....para que seguir?

Seguro que pensáis que con todos esos miedos mejor estaría en casita encerradita, y eso pensé yo durante mucho tiempo, pero pequé de curiosa. 

Algo un día me hizo mirar fuera de mi casita de papel y empecé de nuevo a soñar, aunque yo misma me reprendía por ello. 

Soy dual, siempre hay una parte de mi que me dice "LÁNZATE, VIVE" y otra que me dice "FRENA, CUIDADO", y entre ellas existe una lucha encarnizada.

Esa época fue realmente tormentosa, y deseaba que alguien fuera capaz de convencerme, casi deseaba pedir que me obligaran a salir, pero era imposible para mi pedir esa ayuda porque era justo lo que temía.

El deseo fue creciendo, y llegó un día que las ganas superaron los miedos y me lancé. Fue cuando leí a mi Señor, a esas letras que plasmaba ajeno por completo a mi mirada, y que aún sin saber me llenaban y me daban esperanza.

Necesité más de un empujoncito, bien lo sabe quien lo sufrió, para soltar mis primeras absurdas palabras y dejarme ver. Me sentía ridícula, deseaba huir a la vez que una especie de imán me atraía cada vez más. Seguía con mi lucha interna, con retroceder más que avanzar y aunque intentaba mostrarme segura sabía que Él lo notaba, como si pudiera oler mi miedo, pero no le importase.

Dejó que poco a poco me fuera acercando, sin prisa ninguna se fue mostrando y sin saber como empecé a darme, asustada y sorprendida cuando lo hacía, diciéndome ¿pero que coño haces?¿porque lo has hecho?

No lo sé, no se porque salía así, porque era su solo pensamiento el que me hacía ser yo misma, como si se saltara todas mis protecciones, o pudiera ver a través de ellas.

Confieso que eso daba rabia, que todo el esfuerzo de años para tejer mi fuerte armadura se vea ninguneado de ese modo, que sin saber como estuviese permitiendo que entrase de ese modo en mí, me hacía sentir indefensa y ante eso, toda mi ira salía en mi defensa.

El miedo se muestra de muchas maneras, y la mía es mediante la rebeldía, no me quedo apocada, parece que no estoy asustada, pero ese ataque es la muestra de mi miedo. Incluso en muchas ocasiones, cuando necesito más que el aire que respiro una caricia o un abrazo, me muestro fosca como en un intento de disimular mi debilidad, y quien me conoce de verdad, me da un abrazo y me desarmo en sus brazos.

Soy complicada, lo reconozco, pero mis mecanismos de defensa existen por algo, mi experiencia ha hecho que sean necesarios y los he ido creando, y siempre he pensado que si alguien se merecía lo suficiente conocer mi fondo no tendría prisa, sería capaz de ver y esperar a que cogiera confianza.

No digo que lo ponga difícil a propósito, pero la confianza no se regala. 

Ahora mismo, aunque pueda parecer que no, y me avergüence reconocerlo, sigo teniendo miedos, son muy distintos de esos iniciales, muchas veces ni me doy cuenta, ni los sé identificar, pero lo veo en mis reacciones, y conociéndome me digo: "esto pinta a que estoy cagadita".

Necesito ser sincera conmigo misma, necesito reconocer y aquí en el abrigo de mi refu lo hago, que huyo de mi misma, y que en vez de coger el toro por los cuernos y postrarme temblorosa a los pies de mi Señor, trampeo, disimulo y pongo el escudo de mi rebeldía de por medio.

No me siento bien por reaccionar de este modo contigo, mi amado Señor, porque mereces toda mi confianza, y aunque segura estoy de que conoces mejor que yo los motivos que me llevan a ello, digo PROU!.

Quiero avanzar, quiero dejar a un lado los trampeos, los escudos absurdos y todo aquello que me aleja de mi camino, porque segura estoy de mi entrega a Ti, convencida de mi sometimiento a Ti, y quiero fuera de mi todo lo que me impida sentir mi sumisión. 

Se lo que debo hacer, claro me marcas el sendero y me tiendes Tu mano para que la apriete fuerte cuando mi inseguridad me alcanza.

No sé expresar lo que ahora mismo siento, aunque intuyo que ninguna falta te hace, pues conoces de sobras lo que albergo en mi interior, Tuyas son mis ilusiones y mi empeño, al igual que las luchas que amparo.

Me siento abandonada a Ti, y así es como deseo pasar el resto de mis días.

Aunque me digas "no hay de que".....GRACIAS por dejarme ver...

Tuya, esclava de Tus deseos...

7 comentarios:

  1. SOLO HAY QUE TEMER A NUESTROS PROPIOS MIEDOS,,, Y CUANDO PERDAMOS ESE MIEDO,,,, SEREMOS LIBRES, Y CON LA LIBERTAD SE ENCUENTRA LA FELICIDAD...
    UN BESAZO DANA!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Creo que miedos siempre tenemos...es parte de la condicion humana, y en cierto modo son positivos, porque gracias a ellos podemos ser precavidos, nos avisan de los posibles riesgos...lo que es muy dificil, al menos para mi, es controlarlos, que no dominen mi vida y poder disfrutar de ella...como siempre el dichoso equilibrio...ains...

      feliz noche

      Eliminar
  2. Respuestas
    1. Pues...creo que solo puedo decirte, si es asi....lo siento...porque menudas luchas tengo yo...no se las deseo a nadie...

      Un besote y bienvenida...un placer tenerte por aquí.
      Hasta prontito

      Eliminar
    2. Así estoy yo Dana....
      Gracias por escribir lo que sientes, porque much@s lo compartimos.
      No tengas duda alguna que, a parte de tu Señor, también hay más sumisas con los mismos sentimientos de miedo y/o pánico, y que también en innumerables ocasiones nos dejamos llevar por ellos, y que aquí estamos para compartirlo y hechar una mano, si es necesario.
      Espero que algún día aparezca Mi espejo, Mi guía y Maestro, y que me haga avanzar....
      Besazo!

      Eliminar
    3. Bienvenida al refu Mimicat!
      Anes que nada decirte que de ese escrito hace ya un año, y aunque el miedo es humano y no desaparece del todo, cosa que es buena porque el miedo es una llamada a la precaución, en ese aspecto he mejorado mucho.

      No es porque yo sea especial ni nada, es solo que el tiempo juega a nuestro favor si somos pacientes, porque hace que poco a poco se vaya formando la confianza necesaria para que muchos recelos desaparezcan, para que todo se ponga en su lugar y se descubran las vias de trabajo necesarias para el avance...

      A mi me queda muchisimo trabajo por delante, cosa que por otro lado me motiva mucho, y estoy segura, sino al tiempo, que si asi sientes y es tu deseo encontraras a aquella persona que te complemente en tu sumision y te haga crecer en ella...

      Me alegra mucho tenerte por aqui y te animo a comentar y compartir conmigo aquello que lleves en tu interior y quieras sacar...

      Te mando un gran abrazo y ánimo!

      Eliminar
    4. Muchas gracias Dana!
      Espero poder avanzar, y ten por seguro que ése día lo compartiré con vosotros....
      Me alegro que hayas avanzado tantísimo en un año!
      Mi gran lección pendiente, la paciencia! jajajajajajaj

      Un abazote!

      Eliminar