Pleasure Shelter: Huella

viernes, 26 de octubre de 2012

Huella

Puede que sea una reflexión de las mías, de esas armas personales que uso a mi conveniencia, pero que luego no hay quien las entienda, pero quiero compartirlo porque es algo que he vivido y me apetece recordarlo y expresarlo aquí en mi refu.

Imagino que no es necesario que lo diga, pues es algo que se sabe, pero por si acaso hay algún "despistao", deciros que soy de carácter felino, contrariamente a lo habitual en las sumisas que se asimilan más a dóciles perritas, y... ya se sabe que las gatitas suelen ser enfadonas y sacan las uñas con agilidad.

Pues si, dana es así, y confieso que ayer tuve un día de esos en que la mala leche afloraba con facilidad. 

El porque no viene al caso, pero me hicieron enfadar, y mucho, y a partir de ese momento, ante cualquier cosita que me decían, mis uñas salían de forma natural y mi miau meloso se convirtió en un GRRRRRRRRRR...

Supongo que a todos os ha pasado en alguna ocasión que, una vez que te mosqueas, cualquier cosa ya es motivo para aumentar ese enfado, y entras en una espiral difícil de acotar, hasta que, por lo menos a mi me pasa, me voy a dormir y amanece un nuevo día.

Pues ayer tras ese cabreo, no se porque, vino a mi mente la siguiente cuestión; ¿y si en este preciso momento me reclamase mi Señor?

E instintivamente hice un "GLUPS"...

Cerré los ojos y creé la escena en mi mente y rápidamente vi que esa actitud que tenia en ese momento no me la hubiese permitido mi Señor ni un solo segundo, y que aunque soy humana y me enfado, no podría escudarme en eso y debería cumplir con mis obligaciones como esclava, independientemente de mi estado de ánimo, y más aún cuando mi enfado ya no tenía consistencia, sino que me estaba recreando en ello.

Pensé que esa era una buena ocasión para empezar a gestionar, por mi misma, ese carácter gatuno que a veces me asalta, pues es necesario en muchos momentos para subsistir en este mundo pero siempre que yo lo controle a él y no él a mi.

Así, me dije que, ya que mi Señor había acudido a mi para hacerme ver, aunque de un modo distinto, no podía desaprovechar esa oportunidad.

Todos nos imaginamos escenas D/s preciosas en que las sumisas, dulces y entregadas, se postran ante su Dueño, un ser justo y controlado, para disfrutar juntos de ese momento de sometimiento y dominio. 

Esos momentos son fáciles de imaginar, sobretodo si estás en este "mundillo" porque quien más y quien menos lo ha vivido en sus fantasías o en su realidad, pero...Todos somos humanos, tenemos días buenos y días malos, momentos de enfado, de orgullo, de caprichos, de desanimo. Tanto Am@s como sumis@s.

Igual que es impensable que un Dominante descargue sus tensiones en su siervo, una sumisa no debe refugiarse en esos malos dias para no someterse.

Con estos pensamientos, y sintiendo el momento como si estuviera pasando, lo usé de práctica para aprender a gestionar mis enfados, para concienciarme de que independientemente de condicionantes externos soy esclava y lo soy siempre. Por supuesto que puedo, así me lo permite y me lo exige, decir que me ocurre, como me encuentro, pero no me exime de cumplir con aquello que se me demande.

De este modo, me pareció (quizás fuera así, porque mi Señor o tiene poderes o me ha implantado una webcam), que Él me exigía en ese momento serenarme, controlar mi genio y centrarme de nuevo en mis quehaceres, y por supuesto, estar atenta a todas esas cosas que durante el día debo cumplir como Su sierva.

Puede parecer una bobada pero tras esos pensamientos mi ánimo se calmó, y me sentí feliz porque sabía que me había ahorrado, gracias a esta tonta práctica, una buena regañina y un buen castigo, pues si hubiera seguido así, al reclamarme mi Señor, fijo me lo hubiera ganado...

A veces creo que soy un tocho y no se me quedan Sus enseñanzas, pero cuando veo estas reacciones, esa presencia Suya en mis momentos cotidianos, esa guía muda que sale de mi interior, sin que me esté dando ordenes directas y constantes, me siento reconfortada, porque veo Su huella en mí.

Es maravilloso pasar del enfado al sometimiento con tan solo la conciencia de mi esclavitud y mi deseo de servirle.



4 comentarios:

  1. Tiendo a controlar bien mis enfados, no suelo descargar mi ira con nadie que no lo merezca.

    Mirándolo desde tu punto de vista de sumisa, debe requerir bastante más control, siendo de carácter felino.
    Tu señor estará contento de tu logro... yo lo estaría.

    Beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es bueno saber controlar los enfados, a mi aun me queda tiempo para eso, pero quien no empieza no avanza, asi que poco a poco iré aprendiendo a gestionarlos...Hay tantas cosas que tengo que gestionar!!!jiji

      Gracias Teo por pensar en mi Señor,y por esas palabras, que aunque no lo creas me han ayudado...y mucho...

      Un besin y ánimo!

      Eliminar
  2. Umm...yo soy de enfados rápidos, mi apodo es "gaseosa" jeje!! Pero es verdad que luego, como tu, me recreo en ellos infinitamente. Me ha gustado tu forma de control....y seguro que a tu Amo más. Ves como aprendes mujer de poca fe jaja??

    Besitos felinos y ronroneantes...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Aprender, si aprendo, solo faltaría que no lo hiciera, pero soy lentita hija!!!
      Yo quisiera ser mas ágil, tener ya todo aprendido...es que...la paciencia no es uno de mis fuertes!!!pero no dejaré de insistir, de aplicarme y de dejarme la piel trabajando para conseguir algún día satisfacer a mi Señor...

      Besitos y muuuchas gracias por estar a mi lado

      Eliminar