De un tiempo a esta parte...

Ha pasado desapercibido, lo sé, y mejor que así sea, porque no era el momento, pero ya nada temo, porque todo cuanto forma parte de mi quiero mostrártelo, no tengo porque ocultar nada, y aunque ni siquiera soy capaz de expresarlo ahora, quiero hacerlo.

No estoy habituada a este placer, y por eso, esta noche aunque se pueda considerar una noche perdida, para mí está muy bien invertida, porque sentir no es una perdida de tiempo, y he querido retener la sensación, vivirla intensamente, porque era toda para mí, que para eso me la has regalado...

Ha sido una tarde maravillosa, no porque como muchos piensen haya tenido una megasesión o una tarde de sexo desenfrenado, que ni mucho menos desprecio, sino porque ha sido una tarde de compartir, muchas y distintas cosas, miedos, lágrimas, risas, en la que me he sentido yo misma por completo, sin tensión ninguna. He volcando aquello que desconozco y temo pero a lo que debo enfrentarme, y he podido aportarte algo (creo que lo único) que de momento puedo enseñarte, aunque como sigas así, en dos días está superado...

He ido acumulando gotitas de felicidad durante toda la tarde, pero ese placer extraño al que no estoy acostumbrada, me ha llegado casi en el momento de la despedida, con algo que para Ti ha sido tan natural que, seguramente, ni te has parado a pensar lo que para mí ha significado.

Sé que el titulo de este post ya te habla de ello sin necesidad de decir más, pero sabes que no soy de pocas palabras, que necesito sacarlo y...¿porque no? volver a disfrutarlo.

Has dicho: "de un tiempo a esta parte sí estás siendo buena"...¿eres consciente, mi Señor, de lo que significa eso para mi? ¿del alcance que esas palabras tienen?

Tomé una decisión muy concienzudamente, me decidí a aplicarme del todo, a cumplir con aquello que es mi obligación y aunque todo fluye de manera mucho más natural, y puedo dejarme llevar por como siento, porque nada saldrá ya que no deba salir, también es cierto, que me estoy esforzando, y mucho, aunque no lo haya dicho hasta ahora, porque tampoco es necesario, porque es lo que debo hacer. 

De hecho, sé que es lo que debía haber hecho no ahora, sino ya hace mucho tiempo, y por eso, creía que no merecía sentirme orgullosa, pero cuando has dicho esa frase, que sí, la vuelvo a repetir porque me encanta..."de un tiempo a esta parte sí estás siendo buena"...me ha sobrecogido una emoción desconocida para mí.

He visto mis esfuerzos recompensados, he visto que lo ves, que estás atento a esos pequeños actos, quizás insignificantes, que me han llevado a merecer esa frase de Ti, que dicha con esa espontaneidad y sencillez hasta me parecía haber oído mal. Puede que lo haya soñado durante el poco rato que esta noche he dormido, pero si es así, he soñado precisamente con lo que más deseo.

Ese, mi amado Señor, es justo mi objetivo. Lo único que anhelo conseguir es ser una buena esclava para Ti, que Tú y solo Tú, creas que merezco esas preciosas y valiosas palabras, que sé que no dices en vano, pues nunca me has regalado los oídos.

Crees en mí y la fuerza que eso me da hace posible que me enfrente a lo que jamás pensé ser capaz, y que poquito a poquito, con Tu impagable ayuda, consiga acercarme a mi meta. 

Sé que algún día, ese orgullo que deseo poseas por mi entrega, llegará para colmarte y yo, Tu esclava, viviré completamente realizada sirviéndote y amándote.

Gracias mi Señor...

A Tus pies.