Me parece completamente irresistible cuando atareada en mis quehaceres, mi Señor me sorprende para dejarme muy clarito que tendré descanso sólo cuando sea merecido, cuando haya acabado primero todo aquello que me ha encomendado.
Son increíblemente dulces y excitantes esos azotitos repentinos que me regala acompañando a Su mirada y a Sus infalibles gestos.
Y, ¿qué opináis de esas pocas palabras que no dejan lugar a duda?...
"Te quiero aplicada, ¿entendido?"
Uuuuufffff... ni pensar en desobedecer tal inequívoca orden, que sin remedio me pone las pilas a la vez que me hace sentir ese inmenso placer de saberme instruida por Él...
Lo sé, puedo veros a muchas tratando de provocar ese momento, pero siento deciros que no es lo mismo, no al menos para mí, que disfruto de lo inesperado del instante, del anhelo de mi Señor por dominarme sin necesidad de una provocación de mi parte o rebeldía, que puedo asegurar que no tendría esta respuesta...
"Te quiero aplicada, ¿entendido?"
Mmmmmmmmm....Entendido, mi Señor...
Son pequeños detalles que a veces engrandecen los momentos. Me he acordado de una frase que puso el otro día en twitter, La princesa celta que decía "Un beso en la frente y una palmada en el culo"
ResponderEliminarSaludos, buen día.
Esa frase me recuerda a como mi Señor siempre se despide, seguro que ya te has fijado " un beso y un azote" me dice...y me encanta...
EliminarSon momentos preciosas que dan un plus a todo cuanto sucede...
Gracias por tus palabras!!
Un cordial saludo
Esos detalles sorpresivos son los que engrandecen un instante, una relación.
ResponderEliminarUn beso Dana
Momentos magicos que compartidos con quien siente de este especial modo hacen crecer, sin duda, las ganas de continuar, de crecer, de vivir...Sé que son pequeños los instantes, pero preciosos...
EliminarGracias por tu visita!
Besin