Pleasure Shelter: Como te entiendo!!!...

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Como te entiendo!!!...

Creo que tengo bastante empatía y suelo ser comprensiva con los demás, trato de escuchar y analizar la situación para ponerme en lugar de la persona que se expresa, y así entender lo que siente.

Esto forma parte de mi carácter, y aunque en muchas ocasiones me resulta imposible, porque siempre faltan datos, experiencias previas y emociones ajenas a mi, siempre de inicio trato de comprender.

También me ocurre con mi Señor, por supuesto, y creo que me ha ayudado mucho a mejorar en mi sumisión, aunque confieso que por mi esencia, complementaria a la Suya, resulta complicado y si se lleva al extremo, cosa que también me ha ocurrido, puede incluso ser contraproducente.

Pero hoy, en un hecho cotidiano de mi día a día, no he tenido que hacer el esfuerzo de comprenderle mentalmente, sino que creo haber estado en una situación asimilable a la que yo le he obligado a estar en muchas ocasiones, y he podido sentir en mi misma las sensaciones.

Trataré de explicarme...


Normalmente los correctivos, como es lógico, me los aplica a mí mi Señor, pero hoy he sido yo la que me he visto obligada a corregir a alguien,...y no imagináis como he comprendido a mi Señor...y lo extraña que me siento ahora, por tantas veces como le he obligado yo a Él...

Cuando he observado el fallo cometido, me he sentido decepcionada, enfadada y dolida, y aunque siga queriendo mucho al infractor, o justamente por ello, sabia que no podía consentir que ese fallo quedase impune y se convirtiese en un hábito indeseable.

Yo me sentía mal, peor incluso que si el castigo me lo aplicasen a mi. Por un lado, quería dejarlo correr, como si no lo hubiera visto, pero por otro, no podía ser y eso, duele...

Sé que habrá quien piense que es diferente porque a los Dominantes les pone mucho castigar, cosa que con la experiencia que ya poseo puedo asegurar que no es así. Es verdad que les gustan ciertas prácticas que podrían considerarse como "castigos" (coñe! igual que a nosotros los sometidos), y el hecho de usar esa palabra de forma indiscriminada hace que se tenga esa confusión.

Por suerte, y creo que es lo idóneo, mi Señor siempre me diferencia y define con claridad cuando es una sanción, lo que quiere decir que es por un fallo cometido, o lo que, por el contrario corresponde a la satisfacción de Su deseo, ya sea para mi instrucción o simple placer.

También sé que hay personas sádicas que disfrutan con el dolor ajeno, independientemente de los motivos, al igual que hay masoquistas que disfrutan con el suyo propio, y aunque pueda parecer incongruente dicho por una esclava, no es nuestro caso.

No disfrutamos del dolor en si, no nos motiva por si mismo, sino como señal de la cesión, de la entrega, de esa confianza mutua tan importante en este vinculo, y sé que a muchos de los que me leéis os pasará exactamente lo mismo, porque puede confundirse cuando no se vive, pero se sabe cuando se experimenta dentro de la unión D/s.

Dicho todo eso, hoy he debido aplicar un correctivo, a pesar de que no me apetecía en absoluto, a pesar de que lo único que deseaba era ser dulce y dar mimos, y he tenido que dejar de lado esas apetencias para corregir una actitud.

Mientras aplicaba el castigo lo he pasado mal, y tenía tentaciones de dejarlo correr, de abandonar, pero sabía que era necesario.

Al acabar la sanción me he sentido realmente preocupada, responsable por no haber sabido reconducir previamente la situación para no llegar a ello, como si el fallo fuese mío por no haberme adelantado.

Cuando me he serenado, me he dado cuenta de lo similar que podía ser para mi Señor, cuando Él se halla en ese lugar y yo justo en el contrario.

Por supuesto que comprendo que lo hace porque es necesario, tengo claro que no es algo que disfrute, pero también es verdad que en ciertos momentos, cuando debo ser castigada mi aceptación no llega a tal grado, me centro en mis propias sensaciones, no siempre positivas, dejando de lado las Suyas, y haciendo que con ello me cueste mucho más asumirlo y aprender.

La verdad es que me resulta doloroso pensar que mi fallos pueden causar en Él los sentimientos que yo hoy he albergado, pero sé que haberlo sentido y haber reflexionado sobre ello me servirá para mejorar, por un lado, en mi empeño por no cometer esos errores y, por otro, si los cometo, someterme a los correctivos con una mejor aceptación y con un mayor agradecimiento.

Sé que soy atípica, que veo en mi día a día muchas señales que asocio a mi esclavitud, pero ello también forma parte de mi día a día, no es ajeno y lo mejor que puedo hacer es aprovecharlo y continuar creciendo.

Confío que el correctivo aplicado hoy dará sus frutos en quien lo ha padecido, y a la vez, en mi misma...

Ay! mi Señor, como te he entendido!...no hay nada como experimentarlo en uno mismo para comprender aquello que con palabras es más difícil...

Mi primer impulso es pedirte perdón por el dolor causado con mis fallos pero también fluye en mi el agradecimiento porque a pesar de saber que para Ti es desagradable dejas de lado esos sentimientos y Tus miras son mucho más elevadas, dándome así la oportunidad de ser castigada y aprender a través de ello.

Curiosa reflexión, sensación, emoción...

Gracias mi Señor!




4 comentarios:

  1. Sólo se me ocurre decir: "Como lo entiendo" :-)

    PD: Creo saber quien ha recibido tu "castigo" y en todo caso te diré que, lo que has hecho, ha sido por su propio bien, el de ahora y el de años venideros. No te arrepientas, pues.
    Feliz velada, lady dana. Un beso y un abrazo para tu Dueño que, sin duda, también lo entiende :-)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si intentas ser justo, cuando castigas es por el bien de quien recibe la sanción, pero nadie te libra de esos sentimientos que albergas al hacerlo...

      Por lo menos, me ha servido para darme cuenta y agradecer la gran y difícil labor de mi Señor...

      No dudo de que me entiendas...;)

      Un abrazo amigo!

      Eliminar
  2. A veces esos correctivos son necesarios porque sin ellos el que falla lo seguirá haciendo. No te sientas mal mucho rato, solo el justo para que te sirva a ti de enseñanza. Y yo también creo que quien ha recibido tu correctivo con el tiempo sabrá apreciarlo en su justa medida tal y como tu has hecho hoy.

    Besines!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En realidad no espero que lo aprecie, tan solo que sea capaz de corregir su actitud...con eso...ya sería feliz...espero que sea solo cuestion de paciencia...

      Y yo...ains...es doloroso y a la vez bonito darse cuenta de lo que una persona hace por ti, aunque no tenga porque....

      Besines petardilla

      Eliminar